Suba, Bogotá 28 de noviembre de 2024. Con tan solo 9 años, Juan Pablo Suárez se convirtió en el segundo Niño Alcalde de Suba, en una actividad liderada por el alcalde local, César Salamanca.
Este programa, reconocido como un referente de participación infantil en el país, busca inculcar en los niños el sentido de pertenencia y responsabilidad hacia su comunidad, fortaleciendo el vínculo entre la administración pública y los más jóvenes.
La jornada, que comenzó desde muy temprano, lo llevó al Centro Felicidad Cometas (CEFE), donde Juan Pablo conoció al alcalde local, César Salamanca, desde allí pudo recorrer esta megaestructura, que presta servicios deportivos, recreativos y de aprendizaje.
Una vez arribaron al despacho de la Alcaldía Local de Suba, recibió la imposición de su banda oficial, que lo acreditó como alcalde infantil. Desde ese momento, inició un recorrido lleno de aprendizajes y experiencias únicas.
En su primera reunión participó en el Consejo Local de Seguridad, donde en compañía de la Policía Nacional, el Ejército y el equipo de la Alcaldía, recibieron retos y avances en temas de seguridad y convivencia local.
Posteriormente y durante su visita a la estación de bomberos, Juan Pablo conoció a los hombres y mujeres que dedican su vida a proteger a la comunidad. Allí, no solo cumplió su sueño de montar en un camión de bomberos, sino que también aprendió sobre sus diversas labores, desde la atención de incendios y accidentes hasta el rescate de animales y el traslado de enjambres de abejas.
“Una de nuestras misiones es proteger a los más vulnerables, como las abejas, que son indispensables para el equilibrio de la naturaleza", explicó un miembro del cuerpo de bomberos, mientras le mostraba el equipo utilizado para esta tarea.
Visiblemente emocionado, Juan Pablo expresó: “Ahora entiendo por qué las abejas son esenciales para todos. Protegerlas no es solo su trabajo, es un compromiso con la vida y el futuro”.
El alcalde César Salamanca, quien acompañó al niño alcalde durante gran parte de la jornada, resaltó el impacto positivo de esta iniciativa.
“Ver cómo Juan Pablo se interesa por temas tan importantes nos llena de esperanza. Este programa no solo permite que los niños conozcan la administración, sino que también nos recuerda el valor de escuchar sus ideas y perspectivas”, afirmó durante el recorrido.
La jornada también incluyó la supervisión de obras de infraestructura clave como el Puente de la Vida. Durante la visita, Juan Pablo reflexionó sobre la importancia de estas intervenciones y señaló: “Es una obra que salva vidas, pero también nos enseña que debemos cuidar nuestra salud mental y la de los demás”.
Así mismo, en un diálogo con la personera de Suba, Alba Oviedo, Juan Pablo compartió su visión sobre los principales retos de la localidad. Destacó la importancia de la seguridad en los parques para que los niños los puedan aprovechar y hasta habló del consumo de drogas y el ruido de los bares como problemas prioritarios.
Además, en una reunión con el líder de Desarrollo Económico, nuestro Niño Alcalde propuso al equipo iniciativas que podrían mejorar los salarios de las personas y abrir la puerta a mayores oportunidades laborales en la localidad.
Para cerrar su jornada, Juan Pablo, envió un mensaje inspirador a los vecinos de Suba: “Trabajemos juntos para cuidar nuestra naturaleza, proteger a los animales y convertir nuestras cuadras en sitios seguros”.
Por su parte, el alcalde Salamanca concluyó: “Esta experiencia nos demuestra que los niños tienen mucho que aportar. Juan Pablo nos dejó una enseñanza clara: cuando escuchamos a los más pequeños, encontramos soluciones más humanas y cercanas para nuestra comunidad”.
La Alcaldía Local de Suba sigue consolidando el programa Niño Alcalde por un Día como un referente de participación infantil, promoviendo el sentido de pertenencia y la apropiación de los niños y niñas hacia los procesos de gestión pública. Esta iniciativa reafirma el compromiso de la administración local por construir una comunidad más inclusiva, en la que las voces de los más jóvenes sean escuchadas y valoradas como agentes de cambio para el futuro.